Dejo las instalaciones del Miguel Delibes entre verjas amarillas custodiado por furgones policiales y caballos al paso. Nadie a 200 metros a la redonda, todo cercado como un castillo ideal donde todavía resuenan aplausos en azul y ecos de frases que describen un éxito. Fuera hace frío y el sonido del silencio va amortiguando euforias.

Ha sido un buen finde, intenso, y me voy con esa nostalgia que siempre tienen los finales tras haber tomado un par de pinchos en la sala de prensa. Todo pasa rápido, apenas hace unas horas llegaba por la puerta de atrás, pasaba por los metales y me fundía con el movimiento del poder, que entraba a rebosar el precioso escenario.
¡Tará-tará-tararatará! – ¡Tará-tará-tararatará! – Los acordes del grupo hacen entrar a la enésima escalera nupcial recorrida por los tórtolos baja el delirio de la gente.

El programa comienza en francés con el Presidente del PP europeo, bonachón, cachondo, con pinta de buena gente del que solo entiendo «cheg maguiano» que entona varias veces con gesto de tecnócrata tierno. El super presidente se extiende sobre las grandezas de España y su gobierno para terminar en español con un ¡Viva España! que casi coreo. La ovación es de gala cariñosa y levanta las dos manos como si sostuviera dos orejas invisibles, «togueadog» triunfanteque da el quita a una Cospedal verde esperanza que apuntala en firme un programa resabido de de puntos electorales para Europa.

Y llega Mariano. Tranquilo, orador crecido, con sonrisa y pausas para aplausos. Nos recuerda esa memoria oculta de que hace dos años llegó a una España saqueada, pedregal socialista y ahora nadie se acuerda. Recorre su heroísmo en solitario hasta llegar hasta aquí, donde los números cuadran. Entre retórica de balanzas y primas de riesgo me acuerdo de Woody Allen cuando hace tiempo, en su primer y único ingenio, fue preguntado si era comunista, respondiendo que «ni hablar, porque esa gente solo piensa en el dinero». Así es Mariano y los suyos, marxistas dandys sin saberlo. Todo es economía. Se equivocan.

Sí, Mariano, lo que dice es cierto. Pero así como este conferencia está viciada por los silencios de los ausentes, su discurso está cojo por las ausencias de sus ideas. Cuando llegaste al poder y viste lo que habían dejado aquellos que nunca dejan nada, tenias que haber barrido con todo, pienso, Mariano. Ese es el problema, que oportunidad perdida. Mariano, no escucha mi pensamiento, claro y sigue en su mundo de balances cuadrados.

Sin haber hecho política de principios, teniendo mayoría absoluta -aunque sin mérito- va a lograr que le devuelvan al banquillo dejando un estado saneado para que se lo quiebren los de siempre. Mariano es un hombre valido pero está fuera de juego.

Un tipo que debería haber sido el mejor gobernante español desde el 12M -si no hubiera habido 11M- está explicando méritos de opositor brillante sin ver que la realidad es más capulla. Me da pena, pero igual soy yo, no sé.

Pero es igual para mi alrededor. La gente aplaude cada vez más hasta llegar al delirio cuando promete quitar la mierda de los horizontes de esperanza. Ahora me acuerdo de Orwell y los mundos cerrados y felices.

Vale, allá ellos. Se acaba la fiesta en un domingo nostálgico. Me quedo solo en el escenario vaciado en un suspiro solo iluminado por el mapa de España en azul marino. El mapa de la orfandad mientras todos corren a abrazarse entre ágapes. Hago fotos al vacío, a los espacios reservados hace ya, me parece siglos…

De repente llega una rubia muy guapa a las sillas de enfrente, casi no la reconozco sin el halo del poder y sin rostros de halago alrededor todo cambia.

-¿Te puedo hacer una foto?
-Sí, claro. (Sonríe normalmente como si fuera una foto de vacaciones en Venecia, sin forzar, sin pose, una chica normal).

Sale perfecta, claro.
-Muchas gracias y adelante con fuerza, digo de corazón.

Deja una respuesta

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies